Laura Lis Peña, vivió su primera juventud bajo el rigor de los entrenamientos de una atleta de alto rendimiento, especializada en deportes acuáticos. Pionera de la práctica del kitesurf en Cuba, una lesión le obligó a dejar su vida deportiva y recomenzar su camino. De la mano de Dagoberto Rodríguez, su compañero, se implica progresivamente en el mundo del arte: “Me pasaba que veía en los cuadros y en las esculturas lo que para mi imaginación eran joyas preciosas contemporáneas, divertidas, diferentes…… y así pasó con cada exposición de arte que visitaba, cada libro de arte que tocaban mis manos (…) Se me dio la oportunidad de colaborar en el libro de Más que 10 Concretos y ahí es donde profundizo mi conocimiento por el arte abstracto y me acerco a la historia de Loló. Conocerla me ayuda a ganar confianza en mí, pues hasta ese momento yo no había estudiado ni diseño, ni orfebrería y me faltaba la seguridad para ejercer la profesión de diseñadora (…).”
Ahora, en 2017, como artista debutante, reúne en la galería El Apartamento -bajo el título ASIMÉTRICA– una exposición de piezas de joyería escultórica inspiradas en el movimiento de arte concreto cubano que emergió a mediados del pasado siglo. Las mismas constituyen, un homenaje a la exquisita originalidad creativa de Loló Soldevilla, una de las promotoras y cultoras más importantes de la abstracción en Cuba desde los inicios de la década del 50.
ASIMÉTRICA, como conjunto expositivo, se apoya en la austeridad de las formas primarias: círculo, cuadrado, triángulo. Tales elementos plásticos –puros–formaron las unidades lingüísticas sobre las que se basó el discurso del Arte Concreto. En cada pieza, además, finos hilos de plata vinculan las partes constituyentes entre sí y les permiten relacionarse espacialmente de manera armonizada, a la vez que cambiante, a merced del movimiento corporal, el viento, o simplemente, nuestra voluntad.
(…) Las joyas escultóricas de Laura Lis nos llevan de la mano hacia otra forma de entender las poéticas provocaciones del cinetismo que, como móviles y parques, desarrollara la sensibilidad lúdica de Loló o las infinitas posibilidades visuales de las estructuras transformables de Darié.
Más allá de cualquier presentación formal en el espacio galería, el reto definitivo de estas piezas de arte concreto es que se moverán como trasiego de pendientes o anillos, estableciendo una relación de diálogo impensablemente íntima con sus potenciales espectadores (…)
ASIMÉTRICA, se trata, en última instancia, de un guiño de complicidad y admiración hacia estos referentes agazapados en nuestro pasado reciente, muchos de las cuales no sabemos siquiera si existieron en realidad, o si aún existen.